Pobra do Caramiñal (A Coruña)

Desayunos caseros, baños con burbujas, visita a bodega, días de playa… En una pequeña aldea gallega te espera una escapada a tu medida. No la dejes pasar y aprovecha todas las ventajas de ser socio de Vinoselección.

¿Qué mejor regalo que un tiempo de calidad con uno mismo? Si el día a día y la rutina, te impiden encontrarte con esa parte de ti que tanto te gusta, necesitas una escapada. Pero no una escapada cualquiera, un auténtico viaje de desconexión. Por eso, en Vinoselección te proponemos un fin de semana de desconexión en Entre os ríos, un enclave rodeado de naturaleza, en el corazón de una aldea gallega de antiguos molineros con 300 años de antigüedad. Allí, situada en medio del río Pedras, se encuentra un pequeño hotel rural, ubicado en una casa rehabilitada con esmero y rodeada de agua y naturaleza.

Dispone únicamente de 6 habitaciones, cada una con una propuesta diferente, con jacuzzi, con vistas al río o situadas en lo que un día fue el antiguo molino. Con nuestra propuesta, comenzarás el día con un desayuno casero preparado por Teresa, la anfitriona, a base de productos de su huerto y frutales. Después, visitarás su bodega, con cata de sus vinos acompañados de tapas. Además, recibirás como obsequios una botella de albariño y un set de auto-vinoterapia que podrás disfrutar en la bañera de hidromasaje.

Entre otras muchas opciones, te recomendamos dar un paseo por Pobra do Caramiñal, un cercano pueblo marinero con magníficas playas de arena fina y agua cristalina y con las mejores vistas de la Ría de Arousa, desde los Miradores de la Curota. En un día claro podrás ver el Cabo Finisterre y las idílicas Islas Cíes. Tampoco puedes perderte un día de playa en el maravilloso Parque Natural de las Dunas de Corrubedo o descubrir las tradicionales fábricas de conservas que hay por la zona, así como las rutas senderistas que terminan en piscinas naturales. Cuando vuelvas a Entre Os Ríos, relájate en su jardín, date un baño en su piscina natural y cuídate con una sesión de sauna, para terminar el día contemplando el atardecer entre viñedos con una copa de sus originales albariños, de unas de las cepas más antiguas de la zona.