Ataulfos 2018
Garnacha de terruño
Información general
Ataulfos 2018 recibe su nombre de la parcela que lo origina, un terruño singular, el mejor de cuantos posee Jiménez-Landi en el entorno de la Sierra de Gredos, de 1,5 hectáreas de superficie y orientación oeste. Allí, a 830 metros de altitud, crecen las cepas de garnacha de 60 años de edad, con cuyos frutos está elaborado este fantástico tinto, elegante y equilibrado.
Bodegas Jiménez-Landi es una de las firmas responsables del resurgir de la garnacha en nuestro país. La apuesta por su recuperación es una de sus señas de identidad, junto con las limitadas producciones y una agricultura ecológica y biodinámica. Aunque su fundación aconteció en 1963, el verdadero y definitivo despegue de la bodega tuvo lugar en 2004 con la puesta en marcha del proyecto de reinterpretación de esta variedad en una de sus zonas históricas de origen: el entorno de la Sierra de Gredos.
Frente a la concentración y potencia tradicionales, la garnacha de Jiménez-Landi presenta un perfil más fresco, elegante y sutil. Este es el caso de Ataulfos 2018, un soberbio tinto con 20 meses de crianza en barricas de roble francés, adscrito a la D.O. Méntrida.
Notas de cata
De color rojo picota y capa baja.
En nariz predominan las notas balsámicas, de frutillos rojos, florales, a tiza, tierra y minerales.
Gustativamente resulta equilibrado, con fruta madura presente y notas florales.
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Características generales
Información general
Ataulfos 2018 recibe su nombre de la parcela que lo origina, un terruño singular, el mejor de cuantos posee Jiménez-Landi en el entorno de la Sierra de Gredos, de 1,5 hectáreas de superficie y orientación oeste. Allí, a 830 metros de altitud, crecen las cepas de garnacha de 60 años de edad, con cuyos frutos está elaborado este fantástico tinto, elegante y equilibrado.
Bodegas Jiménez-Landi es una de las firmas responsables del resurgir de la garnacha en nuestro país. La apuesta por su recuperación es una de sus señas de identidad, junto con las limitadas producciones y una agricultura ecológica y biodinámica. Aunque su fundación aconteció en 1963, el verdadero y definitivo despegue de la bodega tuvo lugar en 2004 con la puesta en marcha del proyecto de reinterpretación de esta variedad en una de sus zonas históricas de origen: el entorno de la Sierra de Gredos.
Frente a la concentración y potencia tradicionales, la garnacha de Jiménez-Landi presenta un perfil más fresco, elegante y sutil. Este es el caso de Ataulfos 2018, un soberbio tinto con 20 meses de crianza en barricas de roble francés, adscrito a la D.O. Méntrida.
Notas de cata
De color rojo picota y capa baja.
En nariz predominan las notas balsámicas, de frutillos rojos, florales, a tiza, tierra y minerales.
Gustativamente resulta equilibrado, con fruta madura presente y notas florales.