Félix Azpilicueta Blanco Fermentado en barrica 2015
Ensalzar el blanco riojano
Los últimos tiempos se ha producido un salto cualitativo en los blancos riojanos. Este tipo de vinos vuelve a brillar, principalmente los blancos elaborados en contacto con el roble, como Félix Azpilicueta Fermentado en barrica 2015.
Información general
Félix Azpilicueta, un pionero que levantó su primera bodega en 1881 en Fuenmayor, es una de las figuras más importantes de la historia del vino riojano. Sólo los vinos de más alta gama de la bodega llevan su nombre. Félix Azpilicueta Fermentado en barrica 2015 es un excelente monovarietal de viura (uva tradicional de los blancos riojanos), fermentado y criado en barricas. Más allá del blanco fácil, fresco y frutal, este Félix Azpilicueta destaca por la elegancia y complejidad que le aporta su paso por roble.
Integrada en el grupo de bodegas del gigante Pernord Ricard, líder en la elaboración, comercialización y exportación de vinos de calidad de España, Bodegas Azpilicueta (D.O.Ca. Rioja) fue fundada en 1881 por Félix Azpilicueta con el nombre originario de Romeral. En 2001 Azpilicueta inauguró nuevas instalaciones: un edificio moderno y sostenible, donde tienen cabida procesos recuperados de la tradición como el descenso de la uva por gravedad y la crianza en naves subterráneas. La reputada enóloga Elena Adell está al frente de los vinos de la gama Azpilicueta.
Félix Azpilicueta Fermentado en barrica 2015 resultará muy interesante en el aperitivo con ahumados, ibéricos y foie gras. En la comida combinará a la perfección con mariscos y pescados azules como emperador al horno. Ideal también con comida japonesa como sashimi o nigiri de salmón.
Notas de cata
Ostenta un hermoso amarillo pajizo muy brillante con reflejos dorados.
Nariz increíblemente elegante de intensidad alta en la que intervienen agradables aromas de cítricos (pomelo y limón) y fruta blanca a la sazón junto con notas especiadas (pimienta y eneldo) y toques florales. Más tarde resaltan también notas de bollería fina, frutos secos y lácteos.
La boca confirma su elegancia, resulta cremoso y sedoso en el paso, con una buena amplitud y una magnífica carga frutal que se prolonga hasta el final. Persistente final con reminiscencias de salvia que le dan personalidad.
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Características generales

Información general
Félix Azpilicueta, un pionero que levantó su primera bodega en 1881 en Fuenmayor, es una de las figuras más importantes de la historia del vino riojano. Sólo los vinos de más alta gama de la bodega llevan su nombre. Félix Azpilicueta Fermentado en barrica 2015 es un excelente monovarietal de viura (uva tradicional de los blancos riojanos), fermentado y criado en barricas. Más allá del blanco fácil, fresco y frutal, este Félix Azpilicueta destaca por la elegancia y complejidad que le aporta su paso por roble.
Integrada en el grupo de bodegas del gigante Pernord Ricard, líder en la elaboración, comercialización y exportación de vinos de calidad de España, Bodegas Azpilicueta (D.O.Ca. Rioja) fue fundada en 1881 por Félix Azpilicueta con el nombre originario de Romeral. En 2001 Azpilicueta inauguró nuevas instalaciones: un edificio moderno y sostenible, donde tienen cabida procesos recuperados de la tradición como el descenso de la uva por gravedad y la crianza en naves subterráneas. La reputada enóloga Elena Adell está al frente de los vinos de la gama Azpilicueta.
Félix Azpilicueta Fermentado en barrica 2015 resultará muy interesante en el aperitivo con ahumados, ibéricos y foie gras. En la comida combinará a la perfección con mariscos y pescados azules como emperador al horno. Ideal también con comida japonesa como sashimi o nigiri de salmón.

Notas de cata
Ostenta un hermoso amarillo pajizo muy brillante con reflejos dorados.
Nariz increíblemente elegante de intensidad alta en la que intervienen agradables aromas de cítricos (pomelo y limón) y fruta blanca a la sazón junto con notas especiadas (pimienta y eneldo) y toques florales. Más tarde resaltan también notas de bollería fina, frutos secos y lácteos.
La boca confirma su elegancia, resulta cremoso y sedoso en el paso, con una buena amplitud y una magnífica carga frutal que se prolonga hasta el final. Persistente final con reminiscencias de salvia que le dan personalidad.