La Bota de Palo Cortado 86 “Bota NO”
Un palo cortado único que destaca por su finura y elegancia
La Bota de Palo Cortado Nº 86 “Bota NO” es un palo cortado único, de la selección que realiza el Equipo Navazos en las botas de Pérez Barquero, el productor más “ajerezado” del marco de Montilla-Moriles, por las características de la finura y precisión de sus vinos. La calidad en el trabajo del viñedo es fundamental para eliminar el exceso de gordura de la uva pedro ximénez con un punto de más de madurez. Este es el caso de La Bota de Palo Cortado Nº 86 “Bota NO” (3/8), donde lo incierto se produce: un vino oxidativo que muestra una verticalidad, ligereza y delicadeza que no son características propias de un contundente oloroso cordobés.
Información general
La elegancia caracterizada por La Bota de Palo Cortado Nº 86 “Bota NO” demuestra que a veces lo improbable sucede. Y es que a partir del espléndido trabajo en la viña de cepas ubicadas en los Altos de Moriles, se pude conseguir un vino oxidativo que destaque por su ligereza, finura y delicadeza, algo singular en un oloroso cordobés.
Equipo Navazos lo forma un grupo de personas, en su mayoría grandes amantes de los vinos generosos andaluces, que, representados por Eduardo Ojeda y Jesús Barquín, tienen como finalidad buscar esos tesoros ocultos en las bodegas del marco de Jerez y Montilla-Moriles. Desde el año 2005, llevan seleccionando soleras y botas para embotellar ese vino de manera artesanal y en series muy limitadas -como La Bota de Palo Cortado 86 “Bota NO”-, en colaboración con alguna de las mejores bodegas andaluzas como, en este caso, Pérez Barquero.
Este vino excepcional, del que solo existen 1300 botellas, procede de la saca de octubre de 2018, de una única bota seleccionada de la pequeña solera que contiene este vino. Sin ser muy viejo, con una edad media estimada de 30 años, el resultado final es prodigioso. Con una calificación de 95 puntos Parker, es un vino ideal para acompañar todo tipo de aperitivos, embutido, jamón ibérico, cordero asado, quesos curados, fruta escarchada y algún chocolate.
Notas de cata
Color castaño oscuro, casi caoba, con toques dorados, limpio y brillante.
En nariz aparecen aromas de muy buena intensidad y con mucha calidad de frutos secos, especias dulces, notas tostadas y torrefactas junto a toques balsámicos y salinos. Destaca la riqueza en matices.
Muy aromático, el paso de boca es potente y profundo, pero a la vez es suave y elegante. Muchas de las notas en nariz aparecen en un final largo y muy persistente.
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Características generales

Información general
La elegancia caracterizada por La Bota de Palo Cortado Nº 86 “Bota NO” demuestra que a veces lo improbable sucede. Y es que a partir del espléndido trabajo en la viña de cepas ubicadas en los Altos de Moriles, se pude conseguir un vino oxidativo que destaque por su ligereza, finura y delicadeza, algo singular en un oloroso cordobés.
Equipo Navazos lo forma un grupo de personas, en su mayoría grandes amantes de los vinos generosos andaluces, que, representados por Eduardo Ojeda y Jesús Barquín, tienen como finalidad buscar esos tesoros ocultos en las bodegas del marco de Jerez y Montilla-Moriles. Desde el año 2005, llevan seleccionando soleras y botas para embotellar ese vino de manera artesanal y en series muy limitadas -como La Bota de Palo Cortado 86 “Bota NO”-, en colaboración con alguna de las mejores bodegas andaluzas como, en este caso, Pérez Barquero.
Este vino excepcional, del que solo existen 1300 botellas, procede de la saca de octubre de 2018, de una única bota seleccionada de la pequeña solera que contiene este vino. Sin ser muy viejo, con una edad media estimada de 30 años, el resultado final es prodigioso. Con una calificación de 95 puntos Parker, es un vino ideal para acompañar todo tipo de aperitivos, embutido, jamón ibérico, cordero asado, quesos curados, fruta escarchada y algún chocolate.

Notas de cata
Color castaño oscuro, casi caoba, con toques dorados, limpio y brillante.
En nariz aparecen aromas de muy buena intensidad y con mucha calidad de frutos secos, especias dulces, notas tostadas y torrefactas junto a toques balsámicos y salinos. Destaca la riqueza en matices.
Muy aromático, el paso de boca es potente y profundo, pero a la vez es suave y elegante. Muchas de las notas en nariz aparecen en un final largo y muy persistente.