
Características generales

Información general
Elaborado en Tudela de Duero (Valladolid), pero fuera de la D.O. Ribera del Duero, Leda nació con el respaldo de la crítica desde su primera añada. De hecho, Leda 1998 fue reconocido como Mejor Vino español del año según la revista Sibaritas.Pero lejos de morir de éxito, este gran tinto ha ido creciendo en cosechas sucesivas. El proyecto Leda arrancó a finales de la pasada década de los noventa bajo el auspicio de un grupo de enólogos con una divisa sagrada: ofrecer la mejor expresión de la uva tempranillo (tinto fino).
Para ello, iniciaron una búsqueda de viñedos a lo largo y ancho de la cuenca del Duero, hasta conseguir un buen puñado de microparcelas -muchas de ellas de menos de una hectárea- cuya localización fue cuidadosamente elegida, y todas cultivadas con cepas viejas.
Con este patrimonio y reconvirtiendo una antigua casona en bodega que mantiene una pequeña producción, se gestó uno de los vinos más sublimes del país, un monovarietal de tempranillo muy poderoso y concentrado, que ahora les acercamos en su magnífica añada 2009, Leda Viñas Viejas.

Notas de cata
Color rojo cereza-picota muy madura con ribete granate intenso, muy cubierto de capa.
En nariz resulta concentrado, fragante y muy intenso. En primer plano destacan notas de frutas negras en confitura (arándanos y ciruelas) y recuerdos especiados (pimienta negra). Más tarde aparecen elegantes reminiscencias ahumadas y de cedro tostado. Final con abundantes recuerdos de cacao y fondos balsámicos (regaliz).
En boca es potente, sabroso y muy bien estructurado; disfrutando de taninos de excelente calidad, madurez y nobleza que le dotan de amplitud, firmeza y largo recorrido. Conjunción de potencia, elegancia y sutileza, basada en un marcado carácter varietal de una magnifica añada de gran madurez y equilibrio. Complejo y largo final de boca.
Etiqueta elegante sobre fondo blanco que combina azules y dorados.

Opinión de sus Creadores
"Una expresión moderna y tradicional del tinto fino en una añada clásica en el valle del Duero. Boca plena, grasa, concentrada, con taninos afinados, textura cremosa y un larguísimo final. La madurez de los taninos describe a la perfección la grandeza de la añada."
"Vino intenso, mineral, opulento y elegante."