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Maison Piper-Heidsieck

Maison Piper-Heidsieck

Descripción

Todo comienza cuando un joven alemán descubre la región de Champagne y sus vinos en el año 1777. Este joven llamado Forens-Louis Heidsieck fundará años más tarde, en el 1785, la bodega Piper-Heidsieck.

Desde sus inicios, el fundador demostró la ambición de su proyecto y buscó crear una cuvée que consiguiese deslumbrar a toda una reina, María Antonieta. Heidsieck lo consiguió convirtiendo a la reina en la primera embajadora de la firma Heidsieck & Cie.

A comienzos del siglo XIX, dos hombres, Christian Heidsieck (sobrino de Florens-Louis) y Henri-Guillaume Piper se unen a la empresa de Reims, y consiguen que hasta 14 cortes reales e imperiales tuvieran los vinos de la firma francesa. Se convierten en los vinos de cabecera de las principales casas reales y de la alta sociedad.

Ya en el siglo XX, Piper-Heidsieck se convierte en el champán favorito de Hollywood. De hecho, tiene el honor de protagonizar la primera aparición en la gran pantalla de una botella de champán. Las mayores estrellas de Hollywood se habían encaprichado con Piper-Heidsieck. Actores de la fama de Ava Gadner, Humphrey Bogart, Clark Gable o Marilyn Monroe eran grandes enamorados del champán de la casa francesa.

Piper-Heidsieck elabora sus champagnes con las tres variedades clásicas de uva en la región de Champagne: pinot noir (pontente, aromas a bayas), meunier (afrutada y carnosa) y chardonnay (viva y tostada). Aunque la variedad reina de la casa es la pinot noir, una de las marcas distintivas de Piper-Heidsieck.

Piper-Heidsieck trabaja con crus excepcionales situados principalmente en las zonas de Montagne de Reims y Côte des Bar. Además de sus viñedos en propiedad, la casa francesa tiene una especial relación con sus viticultores, los cuales suelen ser socios independientes.

De esta manera, Régis Camus, maestro bodeguero de Piper-Heidsieck, decidió ampliar el abastecimiento de su uva pinot noir aumentando el número de proveedores y variando la procedencia de las uvas, utilizando así las cultivadas en la zona de Côte des Bar. Esta decisión incitó a moldear la nueva personalidad de los cuvées de la firma.

La edad media de las vides en los viñedos de Piper-Heidsieck es de 30 años. Las cepas más antiguas pueden tener 60 años y se remplazan a razón del 2% anual.

Cada variedad de uva y cada cru se separan, llevándose a su propio depósito. El proceso de vinificación el lento, intentando respetar las características de cada cru. Cabe resaltar, por ejemplo, que 100 crus son necesario para elaborar su Cuvée Brut.

En el año 1995 construyen una nueva y moderna bodega con un espacio majestuoso. Cuenta con más de 200 tinas de vino de acero inoxidable y un área específica para vinos de reserva.

A partir de 1999, Regis Camus empieza a reservar vinos de reserva con los que poder enriquecer los ensamblajes de Piper-Heidsieck. Esta adición de vinos de reserva asegura la alta calidad y la regularidad gustativa año tras año. De hecho, los cuvées sin añada están formados por vinos de reserva de más de 10 cosechas distintas.

En el año 2011, la familia Descours se hace con la firma francesa y por lo tanto empieza a forma parte del grupo EPI. El grupo familiar, con Christopher Descours a la cabeza, continúa evolucionando la gran marca de espumosos de altísima calidad, promocionando su valor artesanal y el buen hacer del lujo francés.

En definitiva, la casa Piper-Heidsieck desde su fundación ha demostrado su capacidad de innovación en la selección y mezcla de vinos excepcionales. La firma ha tenido un objetivo claro: la búsqueda de la excelencia en toda su gama de champagnes creados por su enólogo Emilien Boutillat.