Martínez Lacuesta Tinto Reserva 2008
Rioja clásica y elegante
Información general
Martínez Lacuesta Reserva 2008 es una muestra de la elegancia que caracteriza a los tintos de guarda de la bodega Martínez Lacuesta. Una firma fundada a finales del siglo XIX en Haro, corazón del vino riojano, y que ha desarrollado una excelente adaptación a los tiempos, combinando tradición e investigación.Este Reserva está elaborado mediante el ensamblaje de las uvas tradicionales tempranillo, graciano y mazuelo, y recibió una larga crianza de 24 meses en barricas de roble. Un gran rioja que se encuentra ahora en su mejor momento de consumo.
Bodegas Martínez Lacuesta es uno de los escasos ejemplos de bodegas familiares y centenarias que quedan en Rioja. Recientemente ha inaugurado nuevas instalaciones en el Paraje de Ubieta (Haro, Rioja Alta), donde se da continuidad a la magnífica labor de esta saga.
Notas de cata
Color cereza granate de capa media con vivos destellos rubí en su ribete externo.
En nariz aparecen bien conjuntadas notas de frutos rojos en sazón junto a recuerdos especiados con toques balsámicos y un sugerente fondo torrefactado de buena persistencia.
En boca se presenta como un vino agradable, bien equilibrado, con nobles taninos, jugosa frutosidad y justa acidez, lo que genera una placentera degustación. Final de largo con grato recuerdo especiado.
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Características generales

Información general
Martínez Lacuesta Reserva 2008 es una muestra de la elegancia que caracteriza a los tintos de guarda de la bodega Martínez Lacuesta. Una firma fundada a finales del siglo XIX en Haro, corazón del vino riojano, y que ha desarrollado una excelente adaptación a los tiempos, combinando tradición e investigación.Este Reserva está elaborado mediante el ensamblaje de las uvas tradicionales tempranillo, graciano y mazuelo, y recibió una larga crianza de 24 meses en barricas de roble. Un gran rioja que se encuentra ahora en su mejor momento de consumo.
Bodegas Martínez Lacuesta es uno de los escasos ejemplos de bodegas familiares y centenarias que quedan en Rioja. Recientemente ha inaugurado nuevas instalaciones en el Paraje de Ubieta (Haro, Rioja Alta), donde se da continuidad a la magnífica labor de esta saga.

Notas de cata
Color cereza granate de capa media con vivos destellos rubí en su ribete externo.
En nariz aparecen bien conjuntadas notas de frutos rojos en sazón junto a recuerdos especiados con toques balsámicos y un sugerente fondo torrefactado de buena persistencia.
En boca se presenta como un vino agradable, bien equilibrado, con nobles taninos, jugosa frutosidad y justa acidez, lo que genera una placentera degustación. Final de largo con grato recuerdo especiado.