No se puede entender el vino español sin Rioja y no se puede entender Rioja sin las bodegas centenarias. Bodegas Riojanas (1890) es una de ellas. Sus marcas Viña Albina y Monte Real están entre las más conocidas por el consumidor y han contribuido a forjar un estilo de fama mundial que sigue de plena vigencia. Detrás de su elaboración, Emilio Sojo Nalda (Cenicero, 1963), descendiente de una de las familias fundadoras de la bodega, y camino de las cuatro décadas como enólogo. ¿Quién puede hacer mejor lectura del devenir de esta bodega icónica?

VS. ¿Cómo definiría la identidad del “rioja clásico”?

Es un vino generalmente procedente de una paleta de viñedos ubicados en diferentes parajes y poblaciones de Rioja. Viñedos que por la composición del suelo, su ubicación y la viticultura practicada dan vinos con color de capa media, muy afrutados y frescos.

Las categorías de crianza, reserva y gran reserva se caracterizan por ser vinos con muy buena relación entre la fruta y los matices especiados de la barrica. En boca se nota la finura de los taninos, madurados en roble. En definitiva, el rioja clásico es “un vino fácil de beber”.

VS. ¿Qué diferencias podemos encontrar en el estilo de esos Viña Albina y Monte Real de hace unas décadas y los actuales?

Entorno al 2005 nos dimos cuenta de que las diferencias de estilo entre Viña Albina y Monte Real se estaban estrechando debido al cambio climático. Así que actuamos rápido para volver a diferenciar las marca.

Viña Albina ha sido siempre un “rioja clásico”, pero el cambio climático no se lleva bien con este estilo de vinos, por ello todos nuestros esfuerzos se centran en mantener ese estilo clásico. A esta etiqueta destinábamos viñedos de las zonas de Cenicero, San Vicente y poblaciones limítrofes; pero a partir de 2006 aumentamos nuestro abanico de viñedos buscando mayor altitud, de 580 a 700 metros, principalmente en las laderas de Moncalvillo y el Alto de San Antón, en las poblaciones de Rioja Alta: Alesón, Manjarrés y Ventosa. También hubo cambios a nivel enológico: utilizamos la microbiología existente en el viñedo, desarrollando levaduras autóctonas para que los vinos sean más fieles al origen y reforzar así ese carácter fresco y “fácil de beber”. Las barricas son de roble americano y la limpieza del parque de barricas debe ser muy minuciosa.

Por su parte, Monte Real procede de Cenicero, sobre todo del paraje El Monte, cerca de la ribera del río Ebro. Históricamente se caracteriza por tener más color, fruta confitada, regaliz y más volumen en boca. En este caso, el cambio climático ha jugado a favor en la obtención del estilo Monte Real. Eso sí, para los Grandes Reservas hemos tenido que ir a las zonas más elevadas de Cenicero y orientadas al norte, buscando ese plus de frescura que da más longevidad a los vinos. Enológicamente, también utilizamos la microbiología existente en el paraje El Monte, para reforzar ese carácter de vinos con más concentración y estructura. Las barricas utilizadas son 50% roble americano y 50% roble francés.

VS. ¿Cómo ha cambiado la viticultura en Bodegas Riojanas en los últimos años?

Hoy ya tenemos implantada una viticultura de mínima intervención fitosanitaria y más respetuosa con el medio ambiente, a la vez que orientada a obtener uvas de gran calidad, no solo en los viñedos de la bodega, sino también en los viñedos de nuestros proveedores. Hace tres años lanzamos la escuela de viticultores orientada a informar a nuestros viticultores, a través de profesionales especializados, de las últimas tendencias en viticultura sostenible.

VS. La tendencia es dar menos protagonismo al roble e, incluso, prescindir del roble nuevo. ¿Cuál es vuestra filosofía respecto a la crianza?

En Bodegas Riojanas tenemos claro que el modelo de clasificación de vinos del Consejo Regulador de la D.O.Ca. Rioja -joven, crianza, reserva y gran reserva- funciona bien. Hasta la fecha, los datos en ventas y confiabilidad del consumidor son muy buenos; eso no quita que siempre estemos pendientes de las nuevas tendencias del mercado y de las tendencias de consumo de los distintos perfiles de consumidor.

En algunas marcas vamos a los tiempos mínimos de crianza en barrica (en Rioja, doce meses en la calidad de crianza y reserva); mientras que en otras, alargamos más el tiempo de barrica. En cuanto a la barrica nueva, es imprescindible para construir algunos vinos que necesitan más volumen en boca. También tenemos nuevas propuestas de vinos sin barrica, y otros vinos con solo 4 meses de barrica.

VS. ¿A qué se debe la excepcionalidad del paraje El Monte que nutre a Monte Real?

La marca Monte Real procede principalmente de viñedos ubicados en el paraje El Monte y también de otros parajes ubicados en la localidad de Cenicero. Todos ellos tienen la particularidad de ser terrenos arcillo-calcáreos con abundante canto rodado. De esta forma, los excesos de lluvia se van hacia las capas internas del terreno y la vid no los aprovecha en exceso, dando granos de uva más pequeños y más sueltos. Así tenemos más porcentaje de hollejo (de donde se extrae el color y los precursores aromáticos) frente a mosto; por lo tanto, tenemos vinos con más color y aroma más concentrado.

Esta composición de terreno hace que las abundantes precipitaciones de lluvia en las tormentas de verano drenen rápidamente a las capas internas, evitando el ataque de enfermedades de la vid, como la botrytis, que puedan dar al traste con la sanidad de la uva.

VS. ¿Qué opina sobre la aprobación de las nuevas categorías en Rioja: Vinos de viñedos Singulares, Vinos de municipio y Vinos de zona?, ¿han pensado sumarse a estas menciones?

Me parece bien, pero estas diferenciaciones no deberían ser puntos de conflicto entre municipios y zonas, menos aún para que en algunos sectores se aprovechen para separar la denominación.

Sí, lo hemos pensado; de hecho, cumplimos todos los requisitos: tenemos viñedos singulares, viñedos en diferentes municipios que podríamos separar, bodega en Cenicero, bodega en San Vicente de la Sonsierra y tenemos viñedos en Rioja Alta y Rioja Alavesa.

La última regulación va sobre los viñedos viejos, que son viñedos plantados en 1980 o años anteriores. Nosotros elaboramos de forma separada estos viñedos, en concreto, algo más de 60 hectáreas; por lo tanto, en su momento podremos incluirlo en el etiquetado de algunas de nuestras referencias.

VS. La última novedad del grupo es el lanzamiento de la marca Viña Albina en la D.O. Rueda, ¿algún nuevo proyecto en mente?

Este año hemos lanzado varios proyectos nuevos: Monte Real Garnacha tinta 2020, Monte Real Tempranillo blanco 2020, Viña Albina 120 Aniversario 2020 (50% tempranillo y 50% garnacha), Viore Garnacha tinta 2020 (D.O. Toro) y Viore Verdejo sobre lías 2020 (D.O. Rueda).

Para este año 2022, tenemos la posibilidad de varios nuevos proyectos que en este momento están en construcción. Por un lado, llevamos varios años pensando en un monovarietal de Graciano o Mazuelo. Por otro, este año como novedad tenemos elaborada una Maturana tinta que tiene muy buena pinta. Y hay alguna novedad más, pero es “alto secreto”.

VS. ¿Qué reconocimiento para sus vinos -o la bodega- le haría especial ilusión conseguir este 2022?

Para mí el premio más importante es la confianza y fidelidad que podamos generar en el consumidor, como bodega que elabora vinos de una calidad reconocida y constante año tras año.