3 verdades y 3 mentiras sobre el vino rosado

El rosado es el vino que más ha evolucionado en España durante la presente década. En nuestro país existe una larga tradición elaboradora de rosados; además, somos el segundo país productor de vino rosado a nivel mundial, sólo por detrás de nuestros vecinos franceses. Repasamos verdades y mentiras sobre estos vinos, relegados injustamente durante mucho tiempo y ahora recuperados y en pleno auge.

VERDADES

1. ESTÁ DE MODA. Nadie duda ya de que el rosado es tendencia. La mayoría de bodegas incluyen algún rosado en su portfolio. Y es que estos vinos alegres, expresivos y fáciles de tomar conectan a las mil maravillas con cada vez mayor número de consumidores jóvenes y sin prejuicios.

También es cierto que en los últimos años los rosados han aumentado de forma notable su nivel de calidad. Un salto cualitativo que encuentra mayor reconocimiento fuera de nuestras fronteras, ya que la mayor parte de los rosados españoles se destina al mercado internacional. Los rosados son en definitiva vinos en auge, cuyo consumo está experimentando un repunte en el mercado internacional.

Se elaboran en todos los puntos de nuestra geografía. Son especialmente famosos los producidos en Navarra y Cigales; y otras regiones como Aragón, , Penedès, Utiel-Requena o Méntrida. León, Castilla-La Mancha y Extremadura son otras regiones emergentes en la elaboración de rosados de calidad.

2. ES UN VINO POLIVALENTE. Los rosados son vinos versátiles, perfectos para tomar en cualquier momento, en el aperitivo o para acompañar almuerzos y cenas. Vinos muy versátiles que armonizan con una gran variedad de platos. Muy recomendados para acompañar platos de pasta y arroces; platos más consistentes como unos callos o rabo de toro con un rosado de Ribera del Duero o Cigales; asados como lechales, jabalí o corzo; platos de legumbres como unas fabes con almejas o fabada asturiana; carnes blancas y aves asadas; pescados azules como ventresca de atún o bonito; sardinas a la parrilla y frituras de pescado en general; mariscos; setas, trufas o champiñones con jamón; fiambres y embutidos; quesos frescos; e incluso para acompañar verduras como borrajas, acelgas y espárragos.

3. PERFECTO PARA LOS DÍAS DE CALOR. Por su frescura y notas frutales y golosas, son vinos que experimentan un repunte en los días de calor. Una interesante alternativa a la cerveza y refrescos; de hecho, muchos denominan ya al rosado “el nuevo vermú” o “el nuevo rey de las terrazas de verano”. Recuerda que lo ideal es tomarlo bien fresquito, a una temperatura de servicio de entre 8 y 11° C. Si vas a un restaurante, lo apropiado es que te lo sirvan con una cubitera. Si no, rápidamente se calentará y no podrás apreciarlo en todo su esplendor.

MENTIRAS

1. ES UN VINO MENOR ¡FALSO! Falsamente se ha asociado el rosado a vino femenino o vino secundario. Antiguamente, existía la tendencia a creer que el rosado se elaboraba con las peores de las bodegas, pero hoy día los bodegueros le dedican a estos vinos el mimo que merecen y desechan mucha materia prima antes de su elaboración. La realidad es que un rosado es un vino difícil de elaborar.

2. SE OBTIENE MEZCLANDO VINOS TINTOS Y BLANCOS ¡FALSO! Un rosado se puede elaborar combinando uvas tintas y blancas, pero nunca vino tinto y blanco. Los rosados se crean mayoritariamente con uvas tintas, pero también se permite la mezcla de uvas tintas y blancas.

La uva tinta siempre es necesaria para crear un rosado, ya que, para lograr su característico color rosa, el mosto debe macerar con los hollejos de las uvas tintas (las sustancias colorantes se encuentran sólo en los hollejos -pieles- de las uvas tintas, no en las blancas).

3. UN ROSADO ES LO MISMO QUE UN CLARETE ¡FALSO! La elaboración de claretes es anterior a la elaboración de rosados. Además, antiguamente los claretes sí se obtenían mezclando vinos tintos y blancos, pero este método ya no está aceptado. En determinadas regiones todavía se siguen confundiendo claretes y rosados, pero se elaboran de forma diferente. Hoy, la principal diferencia entre claretes y rosados radica en el proceso de fermentación. En los claretes, la fermentación se realiza con hollejos, pero con una gran proporción de uvas blancas, de forma que se obtiene un vino con poco color. En los rosados, la fermentación se hace sin hollejos (el mosto se colorea mediante una maceración previa con los hollejos).


LOS FAVORITOS DE VINOSELECCIÓN

El panorama español está lleno de buenos rosados. Por su magnífica relación calidad-precio, en Vinoselección te recomendamos:

Protos Rosado 2016

Hiriart Élite Rosado 2016

Albanto La Viña de Las Flores Rosado 2016

Barón de Ley Rosado 2016 

Excellens Rosado 2016

Raíz de Guzmán Rosado 2016

Chivite Las Fincas Rosado 2016

7L Rosado de una Noche 2016

Carredueñas Rosado 2016

Enate Rosado 2016

Muga Rosado 2016

Marqués de Murrieta Primer Rosé Rosado 2016

Quizás te pueda interesar

Repaso a los diferentes estilos de vino blanco de rioja

Vinos blancos de Rioja, un territorio natural

Consejos para armonizar hamburguesa y vino

Hamburguesa y vino: ¿pecado o acierto?

Descubre toda la información sobre Vinosfest 2024

Éxito de Vinofest 2024, el escaparate de la D.O. navarra

2 thoughts on “3 verdades y 3 mentiras sobre el vino rosado”

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Sus datos serán tratados por VINOSELECCIÓN para gestionar su comentario o sugerencia. Podrá ejercer sus derechos de acceso, rectificación, supresión, oposición, limitación, portabilidad o revocar su consentimiento, enviando un correo a gdpr@vinoseleccion.com. Para más información sobre el tratamiento de sus datos, consulte nuestra política de privacidad . Al enviarnos su comentario usted consiente el tratamiento de sus datos personales.