Carmelo Rodero Tinto Crianza 2013
La calidad de la uva como factor diferencial
En un recorrido por la Ribera del Duero más actual no podía faltar Carmelo Rodero. El viñedo es su alma y su seña de identidad. Carmelo Rodero Crianza 2013 destaca fundamentalmente por la enorme calidad de las uvas de tempranillo que se han empleado en su elaboración. Un 'ribera' de libro.
Información general
Carmelo Rodero, hijo y nieto de viticultores, es hoy uno de los nombres más importantes de la D.O. Ribera del Duero. En 1990, después de muchos años de vender sus uvas a bodegas de enorme prestigio como Vega Sicilia, edificó su primera bodega e inició una de las trayectorias más brillantes que se recuerdan en toda la historia de la Ribera del Duero. Carmelo Rodero Crianza 2013 está elaborado con uva tempranillo perfectamente secundada por cabernet sauvignon y maduró durante 15 meses en barricas de roble.
Ubicada en Pedrosa del Duero (Burgos), la evolución de Bodegas Rodero hasta convertirse en una de las principales casas elaboradoras españolas sólo puede entenderse reconociendo el lento pero seguro camino que la familia Rodero trazó desde el bien más preciado del que ahora presumen: su viñedo.
En bodega, el exquisito trato a la uva también es prioritario. Cada uno de los vinos que elabora con D.O. Ribera del Duero procede de una parcela determinada. Y, por tanto, el trato enológico que recibirá cada uva dependerá de muchos factores como la edad de las plantas, el tipo de suelo donde crecen, su orientación y exposición o las diferentes intervenciones del hombre para mejorar la calidad de los racimos. Un meticuloso trabajo que también incluye la elección de las barricas más adecuadas para la crianza de cada elaborado. Carmelo Rodero Crianza 2013 será un magnífico acompañante con guisos de carne, como una caldereta de cordero o un estafado de ternera con setas.
Notas de cata
Preciso color rojo cereza picota madura con ribete granate intenso.
En nariz despliega en los primeros instantes elegantes notas de reducción correspondientes a la serie animal (cuero viejo y caballerizas) que dejan paso a potentes aromas de frutos negros maduros (arándanos y cassis) para proseguir con notas tostadas y de algarroba.
En boca es carnoso, sabroso y con una buena estructura. Taninos de gran calidad tapizan un paso de boca con expresión, madurez y volumen. Gustativamente se funden las notas frutales con ecos especiados y ahumados. Final complejo, y de larga persistencia.
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Características generales

Información general
Carmelo Rodero, hijo y nieto de viticultores, es hoy uno de los nombres más importantes de la D.O. Ribera del Duero. En 1990, después de muchos años de vender sus uvas a bodegas de enorme prestigio como Vega Sicilia, edificó su primera bodega e inició una de las trayectorias más brillantes que se recuerdan en toda la historia de la Ribera del Duero. Carmelo Rodero Crianza 2013 está elaborado con uva tempranillo perfectamente secundada por cabernet sauvignon y maduró durante 15 meses en barricas de roble.
Ubicada en Pedrosa del Duero (Burgos), la evolución de Bodegas Rodero hasta convertirse en una de las principales casas elaboradoras españolas sólo puede entenderse reconociendo el lento pero seguro camino que la familia Rodero trazó desde el bien más preciado del que ahora presumen: su viñedo.
En bodega, el exquisito trato a la uva también es prioritario. Cada uno de los vinos que elabora con D.O. Ribera del Duero procede de una parcela determinada. Y, por tanto, el trato enológico que recibirá cada uva dependerá de muchos factores como la edad de las plantas, el tipo de suelo donde crecen, su orientación y exposición o las diferentes intervenciones del hombre para mejorar la calidad de los racimos. Un meticuloso trabajo que también incluye la elección de las barricas más adecuadas para la crianza de cada elaborado. Carmelo Rodero Crianza 2013 será un magnífico acompañante con guisos de carne, como una caldereta de cordero o un estafado de ternera con setas.

Notas de cata
Preciso color rojo cereza picota madura con ribete granate intenso.
En nariz despliega en los primeros instantes elegantes notas de reducción correspondientes a la serie animal (cuero viejo y caballerizas) que dejan paso a potentes aromas de frutos negros maduros (arándanos y cassis) para proseguir con notas tostadas y de algarroba.
En boca es carnoso, sabroso y con una buena estructura. Taninos de gran calidad tapizan un paso de boca con expresión, madurez y volumen. Gustativamente se funden las notas frutales con ecos especiados y ahumados. Final complejo, y de larga persistencia.