Hacienda de Arínzano 2010
Un impecable vino de pago
Información general
Una finca histórica con tradición vitivinícola casi milenaria, una bodega proyectada por Rafael Moneo o la asesoría enológica de Manuel Louzada, entre otros, son los grandes valores de la Propiedad de Arínzano, ubicada en tierras navarras. Desde aquí les acercamos Hacienda de Arínzano 2010, un monovarietal de tempranillo -una rareza en esta zona tan atlántica- con un claro guiño bordelés en su elaboración, 14 meses de crianza en barricas de roble francés.La Propiedad de Arínzano es uno de los mayores tesoros del vino nacional y fue reconocida en 2007 como primera denominación de origen de pago de Navarra: D.O. Pago de Arínzano. La exclusividad del terruño, su clima, su entorno natural y las técnicas más avanzadas darían lugar a vinos con mucha personalidad y de la máxima calidad.
La bodega ha sido diseñada por el célebre arquitecto Rafael Moneo y cuenta con la tecnología más avanzada. Desde 2015, la bodega forma parte del grupo SPI del magnate ruso Yuri Scheffler y ahora cuenta con la dirección enológica del portugués Manuel Louzada, famoso por su excelente trabajo en Numanthia Termes.
El prestigio de Propiedad de Arínzano se asienta sobre la calidad del vino Hacienda de Arínzano, siendo un tinto elegante, goloso y con carácter. Debido a sus características organolépticas, maridará a la perfección con platos gelatinosos como manitas de cordero rellenas de setas o jabalí estofado.
Notas de cata
A la vista presenta un bonito rojo guinda con ribete teja, de buena capa.Nariz fragante y compleja; en primer plano aparecen elegantes aromas de fruta del bosque en confitura (cereza y mora) junto con notas especiadas (pimienta negra y laurel) y ricos balsámicos (regaliz). Más tarde surgen toques lácteos y de tostados, todo ello en perfecta armonía y sobre un sutil fondo de cacao.
En boca resulta sedoso, redondo, con unos excelentes taninos bien pulidos, y una acidez que le aporta frescura. Largo final con agradables recuerdos de bergamota.
Compartir:

Características generales

Información general
Una finca histórica con tradición vitivinícola casi milenaria, una bodega proyectada por Rafael Moneo o la asesoría enológica de Manuel Louzada, entre otros, son los grandes valores de la Propiedad de Arínzano, ubicada en tierras navarras. Desde aquí les acercamos Hacienda de Arínzano 2010, un monovarietal de tempranillo -una rareza en esta zona tan atlántica- con un claro guiño bordelés en su elaboración, 14 meses de crianza en barricas de roble francés.La Propiedad de Arínzano es uno de los mayores tesoros del vino nacional y fue reconocida en 2007 como primera denominación de origen de pago de Navarra: D.O. Pago de Arínzano. La exclusividad del terruño, su clima, su entorno natural y las técnicas más avanzadas darían lugar a vinos con mucha personalidad y de la máxima calidad.
La bodega ha sido diseñada por el célebre arquitecto Rafael Moneo y cuenta con la tecnología más avanzada. Desde 2015, la bodega forma parte del grupo SPI del magnate ruso Yuri Scheffler y ahora cuenta con la dirección enológica del portugués Manuel Louzada, famoso por su excelente trabajo en Numanthia Termes.
El prestigio de Propiedad de Arínzano se asienta sobre la calidad del vino Hacienda de Arínzano, siendo un tinto elegante, goloso y con carácter. Debido a sus características organolépticas, maridará a la perfección con platos gelatinosos como manitas de cordero rellenas de setas o jabalí estofado.

Notas de cata
A la vista presenta un bonito rojo guinda con ribete teja, de buena capa.Nariz fragante y compleja; en primer plano aparecen elegantes aromas de fruta del bosque en confitura (cereza y mora) junto con notas especiadas (pimienta negra y laurel) y ricos balsámicos (regaliz). Más tarde surgen toques lácteos y de tostados, todo ello en perfecta armonía y sobre un sutil fondo de cacao.
En boca resulta sedoso, redondo, con unos excelentes taninos bien pulidos, y una acidez que le aporta frescura. Largo final con agradables recuerdos de bergamota.