
Características generales

Información general
Cuando Manuel Raventós adquirió en 1914 los terrenos yermos de la finca Raimat, en un desértico paraje de Lleida, casi en la frontera con el desierto de Los Monegros, pocos creían que estuviera en su sano juicio. Casi 90 años después, Raimat es una pujante finca con 2.100 hectáreas dedicadas al cultivo del viñedo que continúa en manos de la familia Raventós, propietaria del Grupo Codorníu. La primera bodega de Raimat data del año 1918, y fue diseñada por el eminente arquitecto modernista Rubió i Bellver apostando por la belleza y la practicidad muchos años antes del boom de la arquitectura del vino. Así nació Raimat con una concepción muy moderna del espacio, buscando agilidad y comodidad a la vez que las mejores condiciones para la elaboración y el envejecimiento del vino. Una posterior ampliación en 1988, realizada de acuerdo con las más actuales tendencias de la arquitectura ecológica y de integración paisajística, dio el aspecto definitivo a la bodega. Ese año se construyó una amplia zona subterránea destinada a la crianza donde se alojan 13.000 barricas de roble, nunca con más de siete años de antigüedad, lo que obliga a una permanente compra y actualización. Actualmente, Raimat es una bodega equipada con la más alta tecnología y una bodega que ha puesto en práctica las técnicas más innovadoras de Europa y el mundo en su viñedo. Fue una de las primeras firmas en apostar por el emparrado en espaldera, dejando atrás la clásica y tradicional viña en vaso, obteniendo así la máxima exposición solar posible para los racimos de uvas, que de esta manera pueden madurar hasta el punto óptimo. Por otro lado, en sus viñedos se cultivan cepas seleccionadas genética y sanitariamente para obtener, libres de cualquier virus, más grado, color y acidez. Una estación meteorológica propia, así como los más avanzados sistemas de lucha contra el granizo y las heladas, evitan indeseadas enfermedades del viñedo como los brotes de mildiu y oidio. La botritys es también una enfermedad prácticamente erradicada en estos viñedos, que además están plantados con pies seleccionados, libres de todo rastro parasitario. Estos detalles, presentes en pocas explotaciones, constituyen el principal valor de Raimat. En la finca se cultivan las uvas internacionales más nobles como Cabernet Sauvignon, Pinot Noir, Merlot y Chardonnay, y otras autóctonas como Tempranillo, Parellada y Macabeo. Su clima continental con grandes oscilaciones térmicas de hasta 20 ºC entre el día y la noche contribuye poderosamente al desarrollo aromático y cromático de las uvas. Por otro lado, diversos lagos artificiales repartidos por toda la finca recogen las aguas de lluvia, siempre escasas en la zona, para poder abastecer la viña en épocas de sequía. Para cada variedad se busca una parcela concreta que favorezca su desarrollo. Mientras que la vendimia se realiza por la noche para preservar la calidad de la uva de fermentaciones y maceraciones espontáneas que tan negativamente afectan la calidad de los vinos cuando se producen. La proximidad de las bodegas de elaboración -los viñedos más alejados distan sólo unos centenares de metros- permite que la uva llegue a las prensas en estado impecable. Ya en la bodega, Miguel Gúrpide, enólogo y director técnico al frente de un numeroso equipo de especialistas, adecua cada partida a las futuras necesidades, definiendo tras análisis exhaustivos los valores adecuados para el vino a elaborar. Raimat elabora una amplia gama de vinos que incluye a los vinos jóvenes (blancos, rosados y tintos), los vinos de Crianza, Reserva y Gran Reserva, vinos varietales de Chardonnay, Merlot, Pinot Noir, Cabernet Sauvignon o Tempranillo, y sus interesantes cavas. Su Brut es un varietal elaborado con la mejor variedad blanca del mundo: la Chardonnay, procedente de la viña La Solana (finca de Raimat).
Notas de cata
A la vista presenta un bonito color amarillo pajizo con reflejos verdosos, excelente formación de rosario, buen tamaño de burbuja y persistente formación de corona en la superficie.
En nariz muestra sutileza y delicadeza, sobresalen notas frutales de manzana junto a recuerdos herbáceos de heno recién ensilado.
En boca trasmite sensaciones de frescura, vivacidad y juventud; carbónico agradable y bien integrado. En mitad de boca destaca por su carácter frutal con suaves recuerdos de frutas cítricas. Buena persistencia final, refrescante y fresca. Desde los entrantes al postre encuentra un buen maridaje a lo largo de toda una comida.